La compra de un teléfono celular de última generación simboliza un lujo con los salarios de los mexicanos
El salario mínimo establecido en México es el más bajo entre los países que integran la OCDE
Para los amantes de la tecnología, tener siempre los smartphones de última generación es casi un requisito, pero también un lujo que la mayoría no puede costearse.
Cuando se tiene un salario mínimo tan bajo como el de nuestro país (80.04 pesos), acceder a este tipo de dispositivos electrónicos se vuelve una tarea complicada pues los costos de estos dispositivos son elevados.
Teniendo en cuenta que actualmente un salario mensual promedio es de 6,500 pesos, pocos mexicanos podrían darse el lujo de cambiar constantemente el modelo de su smartphone.
El Samsung Galaxy s8 por ejemplo tiene un valor de 17,299 pesos, lo cual equivale a 215.16 salarios mínimos, por lo que un trabajador tendría que destinar su sueldo íntegro de 2.6 meses para comprarlo.
Mientras que en el caso de querer comprar un iPhone, cuyo valor es de 15,499 pesos, el trabajador tendría que ahorrar 193.64 salarios mínimos, que equivale a 2.3 meses de sueldo.
El salario mínimo establecido en México es el más bajo entre los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Esto pese al incremento de 9.59% determinado para por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) para 2017, que lleva al minisalario de 73.04 a 80.04 pesos diarios.
El informe Salarios mínimos reales, publicado por la OCDE detalla que el salario mínimo en México es 11 veces más bajo que en Luxemburgo, donde alcanza más de 23 mil dólares anuales.
Según especialistas, esto es un reflejo de los 40 años de rezago que enfrenta el salario mínimo en nuestro país.
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