La empresa extrae 16 millones de litros de agua todos los días
Se valen de la falta de agua, que ellos mismos han provocado, para promocionar sus bebidas
La refresquera Coca-Cola se ha acabado grandes cantidades de agua de la población de San Cristóbal de las Casas, en Chiapas, y la que dejan para los habitantes no es de calidad, afirmó el doctor Marcos Arana Cedeño, director de la Defensoría del Derecho a la Salud en entidad.
Así mismo, el experto afirmó que, en cuanto a la salud, la presencia de la firma ha provocado in incremento en el consumo de la bebida y en consecuencia la diabetes, obesidad y caries entre la población.
El experto aseveró que se ha visto mermada el agua disponible para los más de 200 mil pobladores del municipio de San Cristóbal de las Casas, gobernado por Marco Antonio Cancino González, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM); lo anterior debido a la disminución de los mantos acuíferos derivado de la sobrepoblación, la deforestación y la explotación industrial.
Según el doctor, el último problema identificado y de gran preocupación es que la compañía extrae cada día mil 612 metros cúbicos de agua; lo cual equivale a 16 millones de litros del vital líquido en el municipio, lo cual abastece sin dificultades a 200 mil habitantes con 80 litros por persona todos los días durante todo un año.
“No hay transparencia acerca del monto y destino de los recursos obtenidos para la sobreexplotación de los pozos”, detalló.
En la misma línea, el investigador lamentó que Femsa Coca-Cola ha llevado a cabo “estrategias comerciales monopólicas de discriminación de precios”, sobre todo encaminadas a la población indígena.
“En las comunidades indígenas, principalmente en Los Altos de Chiapas, es donde más refrescos se consumen”, enfatizó. Para lograr que la bebida tenga tal posición en el mercado, la marca ha llevado a cabo estrategias mercantiles “muy agresivas” entre las cuales se encuentran disminuir los costos de los productos que ofrecen en las comunidades hasta en un 30%.
Por lo anterior ha habido un “desplazamiento terrible” de los hábitos alimenticios de la gente, lo cual ha traído “consecuencias terribles” para la salud de los pobladores, lamentó el especialista.
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