¿Consideras que eres multitasking?
Hay una forma sencilla de saberlo…
¿Crees que realmente eres “multitasking” o “multitarea”? ¿Eres capaz de hacer muchas cosas a la vez? ¿Te es posible concentrarte incluso cuando hay ruido a tu alrededor?
Científicos de la Universidad de Tasmania, en Australia, junto con expertos de la Universidad de Utah crearon una prueba para comprobar con números quién realmente es parte del selecto grupo del 2.5% de la población que es “supertasker” o “supertarea”.
¿Sabes cómo comprobarlo? Aquí te decimos:
1. Tres puertas
Tienes tres puertas que se abren una detrás de otra. Tú eres el guardia de un club donde sólo debes dejar entrar gente cool y bloquear al resto. Y el resto es todo aquel que trata de entrar por una puerta por la que dos turnos antes entró alguien cool.
Lo que tienes que identificar es si la puerta que se abre es la misma que la que se abrió dos turnos antes. Todo lo que tienes que hacer es recordar cuál es la puerta. Para lograr esto, debes ser capaz de retener dos veces dos turnos de puertas, es decir, cuatro fuentes de información en una secuencia rápida.
2. Malabarismo mental
Los multitarea son capaces de enfocarse tan bien que, incluso si hay opciones similares y distracciones, sabe dónde tienen que enfocarse.
Lo que está en juego no es la capacidad de memoria, sino la capacidad de hacer malabarismos con las dos fuentes de información sin confundirse o distraerse.
3. Discriminar
El problema es que recordar dos cosas entre tres opciones es confuso, sobre todo cuando interfieren entre ellas, por ello se debe discriminar. Hay que estar muy enfocado para no confundirse con la interferencia.
4. Cerebro relajado
Al contrario de lo que la mayoría de la gente piensa, los “supertareas” no están sobrecargados. Su atención está enfocada en lo que están haciendo, trabajando en las combinaciones necesarias para hacerlo bien sin “distraerse” con otras tareas, es decir, utilizan menos áreas de su cerebro de manera más eficiente.
5. Nivel experto
Los expertos en ciertas áreas son el ejemplo perfecto, pues sus cerebros por lo general realizan menos funciones, pero más eficientemente.
Además, hay ocasiones en que demasiada actividad cerebral deriva en mayor nivel de estrés e incluso menor productividad.
Puedes hacer la prueba gratis en internet.
Fuente: BBC
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