El procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, podo atraer en 2013 el caso del asesinato del líder de la organización Unidad Popular, Arturo Hernández Cardona, y detener al alcalde de Iguala, José Luis Abarca; le di datos, nombres, fechas, ubicaciones, no hizo nada, pudo detenerlo, sostuvo René Bejarano, quien le dio seguimiento al caso.
En entrevista para Noticias MVS primera emisión, consideró que “ahora se trata de evadir responsabilidades que cada quien tiene”, pero él tiene pruebas de que tanto la PGR como la Segob -a través del Cisen- pudieron haber investigado desde el año pasado, al alcalde Abarca, quien ahora se encuentra prófugo de la justicia y está involucrado en el asesinato de 6 personas, 28 calcinados y 43 desaparecidos en Iguala.
Bejarano recordó que Abarca está señalado por testigos como el asesino material de Hernández Cardona, levantado y asesinado en Iguala, en junio pasado. (Ver: “Me voy a dar el gusto de matarte”)
Bejarano retomó lo dicho ayer por Murillo, en una entrevista radiofónica, en la que afirmó que actualmente puede detener en cualquier momento al alcalde con licencia, pues su fuero es estatal y no federal; ¿por qué no lo detuvo antes?, preguntó.
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