A través de un video que circula en las redes sociales se puede observar a un niño brasileño llorando y negándose a que su madre corte un pollo que ella se dispone a cocinar.
El pequeño se conmueve de ver al pollo “solo e indefenso” y decide interceder. Pese que está muerto y listo para ingresar a la olla, el niño se compromete a cuidar del animal.
Desesperado, el niño le pide a su mamá que deje tranquilo al animal y no lo continúe destazando.
Ante la posibilidad de que su madre termine de cortarlo el niño se ofrece a cuidar del pollo.
“Yo lo cuido”, se escucha decir al niño, entre sollozos, con inocencia y ternura.
La grabación fue compartida en la red social Facebook el pasado 13 de marzo y hasta la fecha lleva más de 3.4 millones de reproducciones.
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