Hace poco más de un año el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, José María de la Torre, dijo que un sacerdote tiene un sueldo de 6 mil pesos más otros 1,500 a 2,000 que recibe por oficiar misas.
Sin embargo, no existen documentos oficiales que confirmen la afirmación. De acuerdo con el sitio Catholic.net, creado por la Red Informática de la Iglesia en América Latina, los sacerdotes reciben lo que su comunidad puede ofrecer a través de las limosnas.
Esta percepción no es un sueldo como tal, ya que los sacerdotes no son considerados como empleados, sino miembros de una agrupación al servicio de la comunidad.
Adicionalmente a esta asignación, las diócesis brindan lo necesario para cubrir gastos fijos como luz, agua y comida, según peticiones hechas por cada parroquia.
Cuando la comunidad no cuentan con recursos suficientes y las limosnas no garantizan una vida digna, se usan fondos solidarios de otras parroquias con ingresos mayores, donde “sobra” y existe un límite a las asignaciones que se pueden recibir.
Los sacerdotes pueden obtener ingresos adicionales, ya sea como catequistas en colegios o con labor social en hospitales, así como mediante el apoyo de fieles de la comunidad en el pago de gastos específicos.
De ser cierta la cifra de 6 mil pesos, no distaría mucho del pobre salario que en promedio reciben los profesionistas universitarios en nuestro país, el cual se calcula en 6 mil 870 pesos para los recién egresados, mientras que los estudiantes de preparatoria que han decidido incorporarse al mercado laboral lo hacen con un salario promedio de 5 mil 300 pesos.
Fuente: Dinero en Imagen
También te interesará:
¡Cuidado! Las preguntas ilegales de la Policía que no debes responder
Sé parte de la conversación