Más allá de su textura babosa como escupitajo caliente, su sabor fermentado y su gran parecido a ciertos fluidos corporales, el pulque no es solo capaz de embriagarte, también contiene los nutrientes necesarios para el día a día.
Nuestros antepasados de Mesoamérica lo sabían. Un estudio publicado en los Proceedings of the National Academy of Sciencesdeclara indica que se ha encontrado la evidencia química más antigua de la producción de pulque en Teotihuacán.
Los autores del estudio sugirieron que los mesoamericanos probablemente consumieron esta bebida alcohólica, lechosa y ácida con el fin de satisfacer sus necesidades nutricionales en tiempos difíciles.
Pariente primitivo del mezcal, el pulque se hace con la planta del maguey y entra en la misma familia que la cerveza y la sidra.
Además, se trata de un alimento altamente nutritivo que, según científicos, puede ser un excelente suplemento alimenticio.
Y como el maguey es más resistente que el maíz, la planta puede aguantar los períodos de sequias y las heladas, lo que lo convierte en una buena alternativa en caso de crisis alimentaria.
Fuente: Munchies Vice
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