El estadounidense George Prior decidió comprobar qué tan mala es el azúcar y con un experimento mostró algunas consecuencias de consumir demasiado este dulce veneno.
Su prueba consistió en lo siguiente: durante un mes él bebió 10 latas de Coca-Cola al día.
El resultado no se hizo esperar. De ser un hombre esbelto, su vientre comenzó a aumentar hasta culminar en algo enorme.
La masa de su cuerpo creció como la levadura y su peso cambió a 86 kilos.
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Tras su peculiar hazaña, Prior afirmó:
“Quería recordarle a todos cuánta azúcar beben a diario y cómo eso afecta a su salud”.
Fuente: Genial Gurú
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