El consumo de refrescos y bebidas azucaradas en México disminuyó hasta 12 por ciento en 2014 gracias al impuesto de un peso por litro en estos productos aprobado por el Congreso, afirma una investigación publicada en el British Medical Journal.
El estudio “Compras de bebidas en tiendas de México en el marco del impuesto especial sobre bebidas azucaradas” fue realizado por el Instituto Nacional de Salud Publica (INSP) y el Centro de Población de la Universidad de Carolina del Norte (UC) y dado a conocer este miércoles.
La investigación menciona que aunque en los tres grupos socioeconómicos se redujo el consumo de estos productos, la mayor disminución se dio en los hogares de nivel socioeconómico bajo, con un promedio del nueve por ciento el cual llegó al 17 por ciento en diciembre de 2014.
La investigación explica que, en contraparte, las compras de bebidas libres de impuestos aumentaron un 4 por ciento “impulsadas principalmente por un alza en las compras de agua pura embotellada”.
Refresqueras lo niegan
La industria refresquera y el Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo (ConMéxico) aseveraron que el impuesto a las bebidas azucaradas incrementó en 13.3 por ciento la recaudación hasta noviembre de 2015, pero no logró bajar el consumo de estas bebidas ni de calorías entre la población.
El consumo de refrescos y otras bebidas calóricas sólo disminuyó 1.9 por ciento, en tanto la ingesta de calorías diarias se redujo menos del 0.5 por ciento por día, es decir apenas entre 6 y 10 calorías respecto a las 3 mil 24 que en promedio contienen la dieta de los mexicanos, aseguraron las organizaciones a partir de estadísticas oficiales y estudios de instituciones de educación superior a los que recurrieron.
Fuente: Siglo de Durango y La Jornada
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