MÉXICO, D.F., (apro).- El exdiputado local del PRI Gilberto Arturo Sánchez Osorio fue asesinado afuera de su casa en la colonia Barrio Santa Catarina, Coyoacán.
Sánchez Osorio, de 66 años de edad, viajaba en el asiento del copiloto de su automóvil, marca Mercedes Benz, junto con su esposa María del Pilar Corona y su chofer José Luis Cárdenas.
Dos hombres lo balearon en tres ocasiones y su cadáver quedó tendido en la vía pública. El ataque se perpetró afuera del número 66 de la calle Francisco Sosa.
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) inició las investigaciones por el crimen y descartó en primera instancia el móvil de robo, debido a que no despojaron de sus pertenencias a López Osorio.
La primera indagatoria arroja que dos personas, de entre 30 a 35 años de edad, se acercaron directamente al exlegislador y sin mediar palabras le dispararon en la cabeza.
Las autoridades solicitaron los videos de las cámaras del sector para identificar el rostro de los agresores y el vehículo en el que huyeron.
Gilberto Arturo Sánchez Osorio era secretario general de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares del PRI y suplente del diputado federal Manuel Añorve Baños.
Este último fue presidente municipal de Acapulco, Guerrero, en dos ocasiones. En diciembre del año pasado expresó su interés de contender de nueva cuenta por la gubernatura del estado en los comicios del próximo año.
En enero de 2013, Manuel Añorve se enfrentó con el exgobernador de Guerrero, Rubén Figueroa Alcocer, a quien llamó asesino y lo acusó de orquestar una campaña de desprestigio en su contra.
“Permítanme comentarles que quien está orquestando los ataques en mi contra, es el asesino de Aguas Blancas, Rubén Figueroa Alcocer”, escribió entonces en su cuenta de Twitter.
Y también acusó al hijo del exmandatario, Rubén Figueroa Smutny, de orquestar una campaña de difamación en su contra en las redes sociales.
“Ruben Figueroa Alcocer es quien me ha estado mandando a su junior bipolar a estarme agrediendo sistemáticamente en redes sociales“, escribió en @manuelanorve.
Y es que en 2012 Figueroa Smutny acusó a Añorve, desde su página en Facebook, de haberse robado 100 millones de pesos que estaban destinados para su campaña a gobernador.
El hijo del exgobernador escribió en aquel año: “Manuel Enormes Daños, narcopresidente municipal de Acapulco”, y le imputó haber recibido 2 millones de dólares de Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, detenido en agosto de 2010 por la Policía Federal, además de advertir que mostraría el expediente abierto.
Fuente: Proceso.com.mx
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