(4 de noviembre, 2014).- El informe reciente de la encuesta muestra claramente una sociedad más afectada por la delincuencia, pues 22.4 millones afirmaron haber sido víctimas de un crimen en el último año, mientras que en 2012 fueron 21.6 millones. A pesar de que en su administración, Peña Nieto ha insistido en la supuesta reducción de la tasa de homicidios en el país, la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) a cargo de la Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) muestra un panorama mucho más desolador por los crímenes.
Sobre todos los crímenes registrados, también se muestra un aumento gradual en los últimos años, ya que la reciente publicación indica 33.1 millones totales, es decir, más del 50 por ciento de crecimiento, respecto a los 22.4 millones de 2011. Entre los delitos más repetidos, se encuentran robo, extorsión y robo de vehículos; todos ellos presentaron aumentos considerables.
La Ciudad de México, el Estado de México, Jalisco y Baja California, fueron las entidades con las mayores tasas de victimización, al tiempo que Coahuila, Chiapas, Estado de México, Tlaxcala y Oaxaca fueron los que presentaron mayores incrementos.
Precisamente la victimización generalizada, se colocó como uno de los factores que contribuyó a que los mexicanos aseguraran en la encuesta sentirse inseguros. Al respecto, de acuerdo al estudio del INEGI, el 73.3 por ciento de los consultados se sienten inseguros; segundo aumento registrado en el rubro.
La difusión de este documento, se produce luego de que el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) asegurara que con Peña hubo una reducción de 15 por ciento de homicidios, en comparación con 2013. Dicho descenso, fue anunciado en toda la prensa cercana al Estado como un logro histórico del gobierno actual. Sin embargo, olvidaron explicar por qué es que se produce esta contradicción, sobre la baja en la tasa de homicidios y la percepción aguda de inseguridad.
Fuente: Revolución 3.0
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