A diferencia de otros países, en México los salarios no han aumentado de manera significativa
Oxfam presentó un decálogo para acabar con la desigualdad en México, el cual será entregado a los candidatos presidenciables
En China, país catalogado por tradición como uno de los más económicos para producir por su mano de obra barata, los salarios ya son mayores a los que reciben los mexicanos, según Oxfam, organización internacional que realiza labores humanitarias en el mundo.
“Aunque la productividad en México ha aumentado, como es el caso del sector manufacturero, los salarios no han crecido. Y la participación de los salarios en el ingreso total del país ha disminuido. México compite en el mercado internacional a través de mano de obra barata, manteniendo los salarios muy bajos”, aseguró Diego Vázquez, gerente de investigación de Oxfam México, en la presentación de un decálogo contra la desigualdad, de acuerdo con una nota de Forbes .
A finales del año pasado se aprobó el aumentó al salario mínimo en México, el cual pasó a 88.36 pesos diarios, es decir, 8.32 pesos más por día.
El especialista añadió que los salarios en México presentan un rezago, pues 7.5 millones de personas en el país reciben un salario mínimo, es decir el 14 por ciento de la población ocupada en el sector formal.
“El gran problema es que aunque la gente tenga acceso a un empleo, incluso formal, ya no garantiza que se pueda salir de la pobreza”, dijo.
Por citar un caso, un hogar urbano con un promedio de 3.7 personas, en el que ambos padres trabajen y ganen dos salarios mínimos cada uno, todavía no alcanza la línea de bienestar mínimo.
Esto comprueba que la política salarial no está encaminada a mejorar el poder adquisitivo y acabar con la pobreza.
Por si fuera poco, los mexicanos trabajan jornadas completas por un salario mínimo el cual es insuficiente para salir de la pobreza.
Ante este panorama, el organismo presentó una seria de propuestas de políticas públicas para combatir la desigualdad en México, las cuales se presentarán a los candidatos presidenciables.
Lee el decálogo completo de Oxfam aquí
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